Era la tarde del quince de julio en la comunidad Marlon Zelaya del Municipio de El Castillo del Departamento de Rio San Juan, en una humilde vivienda Julieth Aragón preparaba la cena para su familia, pero de repente entró disparando un paramilitar con el claro objetivo de asesinar a su esposo Justo Bermúdez.
¨Vamos a celebrar este pollo¨ gritó el hombre armado, al instante Justo Bermúdez salió corriendo del hogar, porque sabía que las amenazas de muerte que habían hecho dirigentes sandinistas de El Castillo por haber apoyado la lucha cívica de justicia y democracia se estaban cumpliendo.
Bermúdez logró escapar con vida, pero no se percató que su pequeña hija Stefanie Julieth de diez años recibió una bala en el tórax y una en su cabeza que perforó su cráneo, su madre la trasladó con ayuda de sus familiares al hospital de San Carlos, pero debido a su delicado estado de salud la trasladaron al Hospital Lenín Fonseca y este luego la removió al Hospital de Referencia Nacional Manuel de Jesús Rivera La Mascota.
En este último centro, los médicos la reciben entubada, al instante la conectan a un ventilador y le conectan un catéter, a sus familiares le anuncian que tiene pocas esperanzas de vida, pero su familia pone sus esperanzas de vida en Dios.
Sucede el milagro esperado por la familia
Luego de permanecer por más de un mes recibiendo los alimentos a través de una sonda, los médicos deciden omitir este tratamiento y consideran que ya puede ser alimentada vía oral, los Neurocirujanos y Cirugías plástica reconstruyeron parte de su mandíbula, que le afecta su habla y su movilización.
Hoy en día su madre la trae a Managua a recibir terapias, para lograr que lograr mayor articulación de palabras y pueda lograr caminar, porque sus deseos es seguir estudiando y jugar con sus amigos.
Miembros de Ciudadanos por la Libertad pendientes de su salud
Justo Bermúdez papá de Stefanie es un miembro de Ciudadanos por la Libertad del municipio de El Castillo al conocer este trágico caso, Marcia Sobalvarro presidenta departamental de CxL y el directivo nacional Augusto Valle, decidieron brindar su apoyo a este familia que tenía que hacer grandes esfuerzos, para permanecer al cuido de la pequeña en la capital, pero hoy dan gracias a Dios por haber hecho el milagro de haber salvado esta pequeña que nuevamente le sonríe a la vida.
Caso sigue en la impunidad
Hasta la fecha, la Policía Nacional ni la Fiscalía General de la República abrieron ningún tipo de investigación, para llevar a juicio al actor de los disparos, que buscaba como quitarle la vida Justo Bermúdez por solo el hecho de haber participado como miles de nicaragüenses en las protestas de demanda de justicia y elecciones libres y transparentes.
Bermúdez por resguardar su vida tuvo que exiliarse en Costa Rica, sin perder las esperanzas que la paz regrese a Nicaragua y no sea un delito pensar de manera diferente en su país, sin embargo, lamenta que haya tenido que dejar abandonado su negocio, con el cual lograba mantener a sus hijos pero mantiene las esperanza firme que esta terrible pesadilla un día pasará.
En El Castillo la población denuncia que los ex miembros del Ejército Sandinista trabajan, como paramilitares con la coordinación de los líderes políticos y delegados del gobierno.