Carta abierta a los Jóvenes:
Generalizo siendo consciente que una parte de nosotros estamos indagados através de la lectura y platicas con personas mayores e incluso con nuestros familiares de los desastres en nuestro país causados por los políticos en los últimos 41 años.
Por mi parte, no quiero cargar sobre mis hombros el no haber hecho nada por contribuir al cambio general en mí país, y para esto primero debo empezar por mi actitud, educación, democracia, participación, con esta premisa y en la actual coyuntura debemos ser tan críticos como seremos criticados en el futuro, es decir lo que hagamos hoy, mañana nuestros hijos gozarán los aciertos o sufrirán las consecuencias de los malos actos.
Es cierto que el pueblo de Nicaragua demanda popularmente unidad, aunque técnicamente se llama alianza de fuerzas sectoriales y partidarias, habiendo mencionado esto, ya no es posible ni debemos permitir que en el siglo XXI donde las redes sociales nos permiten expresarnos abiertamente, quieran censurar el debate o decisión ideológica de cada ciudadano, y es que esta debe ser respetada porque es base para la construcción de un plan de nación que se fundamenta en los principios de las mismas.
El decálogo ético para políticos que presentó nuestro obispo Monseñor Rolando Álvarez, el pasado mes de febrero lo llevo presente todos los días y lo hago propio, voy a ser participe de la transición a la democracia en Nicaragua sin descalificar a nadie, pero eso no significa que deje de criticar constructivamente con el fin de superar los errores históricos, no voy a juzgar, pues las personas han creado a través del tiempo y su actuar su propia fama, no me importa la privacidad de los individuos, me interesa los aportes constructivos que abonen a la construcción de una república Nicaragüense.
Si hoy no sos parte del cambio de la politica tradicional a la nueva forma de ejercerla, estarías decepcionando a tu generación, demás esta decir que debemos insidir e interesarnos en el proceso de transición, recordemos el poema de Rubén Darío:
Juventud, Divino tesoro ¡ya te vas para no volver! Cuando quiero llorar, no lloro Y aveces lloro sin querer
¡Este es tu momento, Viva Nicaragua libre!