No solo Suecia con inmunidad colectiva ha elegido un camino especial en la lucha contra el coronavirus. No solo Bielorrusia con el horocorismo del «padre». El caso más singular es Nicaragua. El estado sandinista simplemente no reconoce las pandemias. El régimen ordena a los nicaragüenses a vivir como antes: bajo el poder inquebrantable del partido y el gobierno. Sin cuarentenas, más manifestaciones y carnavales. El autoaislamiento se ha convertido en un curso de oposición democrática. «Quédate en casa!» – en la consigna sediciosa de protesta.
“La situación en Nicaragua es tal que incluso cuando la prioridad es la lucha contra COVID -19, es imposible desviarse de la política. La razón es el gobierno, que es incapaz de servicio público, pero es bastante capaz de mantener prisioneros políticos incluso durante una pandemia. El número de asesinatos también está aumentando «, dijo Oscar Sobalvarro , vicepresidente del partido de oposición Ciudadanos por la Libertad (CXL), en una entrevista con V Crisis.ru . Estas palabras del veterano contra , el rebelde Comandante Rubén contienen una explicación completa de la dramática situación (es solo en Nicaragua).
A finales de abril, 13 personas fueron reconocidas como enfermas en Nicaragua (la población del país es de aproximadamente 6 millones). Otros 15 nicaragüenses están bajo sospecha. Tres han fallecido. Incluso esas estadísticas, claramente «enderezadas» por las autoridades, parecen extremadamente alarmantes. La mortalidad por COVID-19, basada en datos oficiales, en Nicaragua es casi una cuarta parte. Pero el régimen gobernante es la calma olímpica.El primer nicaragüense que murió de un coronavirus es Osiel Herrera , un hombre conocido en su tierra natal y latinoamericano, el primer diseñador de moda del país, gerente de la industria cosmética. 15 de marzo, fue al médico. Fue diagnosticado con coronavirus solo una semana después. 26 de marzo Herrera se había ido.
La pareja matrimonial en Nicaragua consideró necesario reaccionar ante esta muerte . El fallecido pertenecía a la élite local, su trabajo creó una imagen positiva del país. El presidente Daniel Ortega y la vicepresidenta Rosario Murillo lo conocieron personalmente, estaban muy contentos con él. Pero en una declaración oficial, el énfasis está en una circunstancia: el 12 de marzo, Osiel Herrera regresó a Nicaragua de un viaje de negocios colombiano. Entonces, se infectó allí. Entonces, en las posesiones de Ortega – Murillo no hay coronavirus.
La misma línea se mantuvo y continúa hasta nuestros días. No es sorprendente que el gobierno haya aceptado aceptar la asistencia del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF). El lunes, la ayuda humanitaria llegó a Managua: 1,650 equipos de protección personal. «Los niños y adolescentes son víctimas ocultas de la pandemia «, dijo Ivan Erovi, representante de UNICEF en Nicaragua . Las autoridades guardan silencio. No hay días festivos debido a la epidemia; las escuelas aún funcionan. Las personas que retienen a niños en el hogar están sometidas a una fuerte presión de la administración y la propaganda.
Nicaragua es uno de los países más pobres lejos de la parte más rica del mundo. Este no es el caso cuando se observa el material y el nivel de vida de la élite local. Pero esto se refleja plenamente en la atención médica nacional.
En la década de 1980, el régimen martegista-oligárquico de Ortega se refirió a la guerra civil: dicen que el imperialismo estadounidense no permite demostrar la brillantez de los logros sociales. Ahora, solo el régimen oligárquico del mismo Ortega no considera necesario explicar de alguna manera.
Las estadísticas hablan por sí mismas. 10 mil nicaragüenses tienen menos de diez médicos. (En Rusia, donde la situación con la medicina no se considera ideal, treinta o cuarenta). En los hospitales, no solo la ventilación y las máscaras, sino incluso el alcohol y el jabón no son suficientes.
«Se preocupan por el dinero, no por las personas «, explica el famoso neurocirujano Hosmar Briones . Obligado a abandonar el país y ahora encabezando la Asociación de Médicos Nicaragüenses en el Exilio. » Necesitan ingresos financieros y creen que les interesa mantener abiertas las fronteras». Sin embargo, confían en que la comunidad internacional y nosotros, los exiliados nicaragüenses, no permitiremos la extinción de nuestro pueblo. Ni el gobierno ni las grandes empresas privadas quieren responder por esto ” . El presidente Ortega confirma las palabras del médico disidente: «Si ordenamos a la policía, el ejército y los granjeros que se aíslen y detengan la producción, el país simplemente desaparecerá» . Es aún más franco: comienza directamente de la policía. Esto está aún más cerca del punto.
Ortega habló el 16 de abril. Después de un mes de ausencia en público. Incluso se preocuparon por él, después de todo, 74 años (Murillo, 68 años). Pero resultó ser en vano.
El jefe del régimen sandinista volvió a llamar a un mitin a su alrededor. Y no te preocupes por otras razones. Después de todo, la lucha contra el coronavirus está dirigida por su esposa. El vicepresidente Murillo organizó el 14 de marzo una procesión masiva «Amor en los tiempos de COVID-19»: «¡Caminemos por el país con el poder de la fe y la esperanza!» Es cierto que ni ella ni su esposo fueron vistos en las «marchas antivirus». Parece que ambos son normales, a pesar de la conocida pasión por los rituales místicos y los amuletos.»El gobierno está ocultando datos epidémicos disfrazándolos de neumonía «, continúa Oscar Sobalvarro. -No se toman medidas sanitarias. Es más probable que las autoridades propaguen la infección convocando a sus seguidores en reuniones de carnaval, reuniones con activistas del partido y funcionarios del gobierno. Las personas se quedan en casa y siguen las recomendaciones de otros países. Pero esto es difícil si el peligro de infección proviene del gobierno «.
Puede parecer extraño por qué el partido gobernante en Nicaragua, el SFNF, ha elegido esa estrategia. De hecho, incluso Castro en Cuba y Maduro en Venezuela hacen las cosas de manera diferente. Aunque también necesitan dinero y la constante preparación para el combate de la policía. Esta diferencia se ve afectada por la situación política particular en Nicaragua. Aclarado en un discurso del lunes por la presidenta de Citizens for Freedom, Kitty Monterrey .
«Tenemos dos batallas y debemos ganar las dos «, dijo Monterrey. – Con el modo Ortega y con COVID -19. Desde hace varias semanas, hemos estado librando una lucha silenciosa pero efectiva para prevenir la infección. Hemos organizado cadenas de solidaridad para proteger a los más expuestos. Si logramos enfrentar la pandemia uniendo los esfuerzos individuales de todos, ¿por qué no hacer lo mismo en la lucha por la libertad y la ley? Los nicaragüenses deben combinar el idealismo y el coraje con disciplina y realismo. Nicaragua ha cambiado desde abril de 2018, el mundo está cambiando como resultado de COVID-19. Crearemos una alternativa viable, superaremos la realidad de la represión, la pobreza y el atraso en que vivimos ahora ” .Abril de 2018: la fecha del levantamiento civil de Nicaragua. Causada, por cierto, por nada más que una reforma de pensiones del gobierno.
El siguiente acto de arbitrariedad sandinista no se desarrolló sin consecuencias. Decenas de miles de nicaragüenses salieron a las calles. No solo contra el robo de pensiones estatales. No solo contra la corrupción de los sandinistas con el Canal de Nicaragua, el envenenamiento de los lagos y la compra de tierras por parte de la «capital roja» del multimillonario chino Wang Jing. Los manifestantes exigieron la salida de las autoridades del SFSS. La pregunta surgió sobre el poder. El régimen Ortega – Murillo (casi el nombre oficial) respondió a la protesta pacífica lanzando castigos bien equipados. La sangre se ha derramado. “La muerte se cierne sobre Managua. El reino de las armas y el miedo. Esta es la regla de la pareja presidencial » – describe los Oscar Sobalvarro realidades de Nicaragua del año antepasado.
Las «tías» locales juegan un papel importante en el mantenimiento del régimen. La policía atrapa a los activistas del SFSS y el «servicio de campaña electoral» del partido (un nombre modesto oculta una estructura muy siniestra, el Sandinista Cheka-NKVD bajo el mando de un oficial especial llamado Lenin Serna ). Los que marcan con huesos de calavera las casas de los activistas de CXL. Los que conducen marchas, Rosario dirigió en nombre de Daniel. ¿Cómo sacarlos de las calles? ¿Qué pueden ser las cuarentenas? Camarilla debe ver desde las ventanas las filas de su guardia, las multitudes de sus fanáticos. Esta es la garantía de su salud …
Fue de Nicaragua que la canción Resistiré llegó a Rusia . Sang Maria Ocana , una doctora de España. Arrojó a través del océano, Marcia Sobalvarro , hermana del comandante Rubén. “Quédate en casa, quédate … ¡Resiste! «Quédate en casa, quédate … ¡Resiste!» Sí, la resistencia puede ser así. En una selva o en la calle, en el trabajo o en casa.
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